Querido Javi:
No es fácil escribirte una carta y mandártela al cielo, donde te fuiste un 17 de Noviembre del 2000. Ya sabemos que tú, que estabas lleno de vida, de sueños y de ilusiones, no te fuiste por voluntad propia, lo decidió un asesino sin corazón.
Éste, tu pueblo, el pueblo de La Cistérniga, no baja la cabeza, NO, por el contrario mira de frente a ese asesino cobarde y se siente muy orgulloso de tí. En estos duros momentos, somos como tu fuiste: fuertes y valientes.
Hoy estamos aquí, el pueblo de La Cistérniga, tu pueblo, pidiendo la dignidad que merece tu memoria y tu recuerdo, y la justicia que un atajo de incompetentes, ineptos y miserables no te han dado. Hay mucho dolor, indignación y rabia en tu pueblo, La Cistérniga, donde te criaste y fuiste feliz. No te preocupes por tu familia, tenemos mucho cariño y apoyo para darles. Ellos no están solos. Estamos aquí para ayudarles a llevar este terrible dolor.
Estás en cada uno de nosotros y TODOS SOMOS TÚ. Somos Francisco Javier Sanz Morales.
Mantendremos vivo tu recuerdo y pedimos a Dios que te dé la Paz y la Justicia que te han negado los hombres.
TE QUEREMOS Y TE RECORDAMOS
TU PUEBLO, LA CISTÉRNIGA
Nota: Marcos Martín Ponce es el ’grapo’ a quien el Tribunal Supremo absolvió de una condena de 30 años que le había impuesto la propia Audiencia Nacional por el asesinato del agente de Seguridad Ciudadana Francisco Javier Sanz Morales en noviembre de 2000.
El alto tribunal anuló este fallo al considerar determinante la ausencia en el juicio de una testigo directa de los hechos, que en su día identificó fotográficamente "sin ningún género de dudas" al terrorista como autor del disparo que acabó con la vida del policía Francisco Javier Sanz Morales en Madrid. Esta mujer no fue localizada por la Policía Judicial para que diese su testimonio en la vista pese a tener el estatus de testigo protegido.
Con tu comentario pediremos la revisión de la sentencia y justicia para Javi. Gracias.
